Un reciente caso confirmado de tosferina en Quintana Roo ha llevado al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) a intensificar sus medidas de vigilancia en las clínicas y hospitales del estado, la enfermedad, altamente contagiosa, representa un riesgo significativo para niños menores de seis meses y personas con sistemas inmunológicos debilitados.

El IMSS ha implementado nuevas normativas de salud, que incluyen el uso obligatorio de mascarillas para todas las embarazadas que ingresen a sus instalaciones. Esta medida se enfoca en prevenir la propagación de la tosferina, una infección respiratoria que se transmite con facilidad entre las personas.

De acuerdo con datos del Sistema Nacional de Epidemiología, hasta la semana 28 del presente año se han registrado 171 casos de tosferina en México, cifra que supera con creces los 50 casos del mismo período en 2023. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha emitido una alerta por el incremento de casos en la región, destacando a países como México, Brasil, Estados Unidos y Perú.

La bacteria Bordetella pertussis, causante de la tosferina, es particularmente peligrosa para los lactantes no vacunados y aquellos con inmunodeficiencias. Este aumento en los casos resalta la necesidad urgente de mantener actualizada la vacunación y de aplicar medidas de prevención más estrictas.

El IMSS y las autoridades sanitarias en Quintana Roo están comprometidos a monitorear de cerca esta situación y a proporcionar las herramientas necesarias para proteger a la población, especialmente a los más vulnerables.

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